En la isla Samo, ubicada en Dinamarca, cuenta con 4.000 vecinos que hoy son noticia porque se han puesto un objetivo en común, ser autosuficientes en energía renovable los próximos 10 años
El proyecto surgió desde el Gobierno Local en 1997, donde la Agencia de Energía Danesa, patrocinó un concurso a nivel nacional, para seleccionar la isla cercana a la costa, que tuviera el mejor plan para ser un 100% energéticamente sustentable, en un marco comprendido dentro de 10 años. El financiamiento es por parte del gobierno y en parte por inversiones particulares, los habitantes han invertido alrededor de 56.000 millones de euros.
Hoy, el 100% de los isleños, usan electricidad verde de numerosas turbinas eólicas, 11 molinos en tierra firme cubren toda la demanda en electricidad y el 70% de los hogares tienen calefacción que proviene de combustibles biológicos y de la energía solar.
Con centeno, trigo y paja se calientan edificios de una sola planta, mientras los paneles solares estan presentes en cada vivienda.
Ademas de la utilización de energías alternativas, también reciclan, ya que la ceniza de los hornos se usan como fertilizantes para las nuevas cosechas, un circuito perfecto. “Un subproducto, una masa verde dura de las semillas de colza prensadas para bio-diesel, se usan como alimento nutritivo vegetariano para animales, eliminando la necesidad de importarlo del exterior”.
«Samso se ha impuesto una agenda para el tema del cambio climático, y ha demostrado que es posible», sostiene Soren Hermansen, director de la Academia de Energía de Samso”.
Los resultados demuestran que el “75% de las necesidades de calefacción, se cubren vía energía solar y energía biomasa, se ha reducido las emisiones de contaminantes claves, tales como el dióxido de carbono, dióxido de sulfuro y óxido nitroso en un 142%, 71% y 41% respectivamente”.
El resultado mas importante es que esta revolución ecológica de Samso, ha unido a toda la comunidad para mejorar su economía. “Las cooperativas inversoras, permiten a los habitantes obtener ganancias sustanciales, mediante la devolución de sus inversiones, en acciones de las turbinas eólicas. El exceso de kilowatios eólicos generados por hora, son transferidos a la principal red de energía de Dinamarca, ayudando a aumentar las acciones en un 20%, por el consumo energético de los daneses. Los fabricantes daneses de energía eólica, quienes experimentan un gran auge en la demanda, ahora dan cuenta del 40% del mercado mundial con Alemania y España, comprando 24% y 10.5% de las exportaciones de turbinas danesas. Eso explica los 3,4 billones de dólares EUA, o aproximadamente el 18% del PBI danés”.
“Al aumentar el autoabastecimiento de la región, nuevos mercados se han abierto, generándose a su vez, trabajos bien remunerados. La presentación de estos proyectos de energía renovable, ha llevado a los habitantes de Samso, a adoptar un estilo de vida que estimula su economía, mejora su modo de vida y mantiene limpio su medio ambiente”.
Queda solo un reto por lograr, el transporte, donde Samso esta comenzando a utilizar aceite de semillas de colza (canola), prensado en frío, colado y alimentado directamente a los motores diesel ligeramente modificados como tractores agrícolas y operadores de barcos.
Los habitantes de Samso van por mas, pretenden desarrollar una planta de hidrógeno, para avivar los motores de otros vehículos.
«Usar recursos locales disponibles, producirlos de manera autosuficiente y exportar energía verde es algo que a otros países les gustaría ver», apunta Rudolf Gabrovec, embajador esloveno.
“Los habitantes ven que sus esfuerzos les han traído beneficio a ellos, a su isla, a su país y al mundo. Como tal, Samso es un modelo extraordinario hacia lo que todas las comunidades pueden evolucionar”.
Fuente y Articulo Completo: http://magazine.godsdirectcontact.net/spanish/180/gd_29.htm ; http://bloglemu.blogspot.com