La especies conocida como Stevia rebaudiana es originaria de Sudamérica y ha sido cultivada y utilizada como edulcorante y como planta medicinal por el pueblo guaraní durante al menos 1500 años y por un tiempo indeterminado por otras poblaciones de Brasil y Paraguay.
A estas especies se le han realizado innumerables investigaciones médicas dando resultados siempre positivos sobre sus beneficios en la salud. En 2006, los datos de investigación recopilados en la evaluación de seguridad publicado por el Organización Mundial de la Salud no encontraron efectos adversos para la salud para quienes la consumen.
La característica más importante es que sus hojas tienen una capacidad edulcorante entre 30 y 45 veces mayor que la de la sacarosa, de allí radica su bajo contenido calórico. Sin embargo, el consumo de la stevia ha sido asociado también con una mejora del aparato digestivo en general, reduce la presión arterial, ayuda a las personas que sufren de ansiedad, reduce los niveles de grasa en personas con obesidad, es diurética, mitiga algunos síntomas asociados con el reflujo, presión alta, gota y diabetes tipo 2.
En estado silvestre esta planta crece en terrenos arenosos, poco fértiles y de buen drenaje, pero puede ser cultivada en nuestras casas como planta de jardín o en macetas. Solo requiere mucho sol y mucha agua, protección de los fuertes vientos y cuidados mínimos hasta su cosecha.
El proceso de la cosecha se puede realizar cada otoño, luego de florecer. A partir de la primavera, se puede reproducir por esquejes, de una planta que rebrote en primavera se logran de 200 a 500 plantas, esquejando durante todo el tiempo que vegeta. La planta es plurianual, es decir, que puede rebrotar 4 a 5 años, cada primavera arranca otra vez con fuerza, rebrotando nuevos y numerosos brotes desde debajo de las raíces.
Comúnmente se consumen las hojas frescas o secas, en infusión o como ingrediente dentro de la comida. Se puede masticar 4 hojas frescas antes o durante el desayuno todos los días y algunas hojas más durante la comida o la cena. Para realizar una infusión tanto con las hojas frescas o las secas, para una taza de agua se debe hervir una cucharadita de hojas y dejar reposar por 10 minutos.
Para quienes consumen mate endulzado con azúcar, les recomiendo colocar dentro del termo un puñadito de estas hojas y comenzar a cebar. El resultado es tan similar al consumo de azúcar que ni parece que no lo fuera.
Comercialmente, es posible encontrar este producto en dietéticas en forma de gránulos o líquida además de las hojas. En la ciudad de Rio Cuarto se pueden conseguir plantines los días sábados en la plaza Roca, donde los productores del INTA venden sus productos.
En internet hay innumerables recetas de tortas y postres que se pueden realizar con este producto totalmente natural, solo hay que chusmear un poquito on line.
+ Info: http://www.tiempoconsciente.com
Fuente: Periódico La Ribera. Río Cuarto. Febrero 2014